la vida empieza a los treinta

21.8.06


NOVIEMBRE

Te amo, lo digo en voz baja
pero con franqueza
y tengo miedo de no ser capaz
de levantar la voz,
de no estar a la altura otra vez
de lo que siento,
de que me vuelva a invadir el terror
a que vuelva el silencioso lamento

de tener que olvidarte amor, en silencio.

15.8.06

EL COMPROMISO

El compromiso es un ejemplo más de cómo funciona el miedo, es curioso darse cuenta, qué listo es el jodío Nos inventamos un royo medio coherente que explica cómo el compromiso es algo importante, positivo y un paso fundamental para una pareja y a todo aquel que dude de los beneficios del compromiso le tachamos de inmaduro, de no querer crecer o de tener miedo a amar.
Cómo puede ser eso de que la pareja que se ama debe convertirse en un todo, en una unidad mágica e inexplicable, en un mismo fin. Cómo puede ser que prometer no tirarse a otras personas haga que desees más a tu pareja, qué necesidad hay de prometer algo que nadie sabe si va a cumplir, algo como amarse para siempre y pensar que esta promesa va a fortalecer una relación. Yo creo que no, creo que esa promesa tiene el fin de darnos el derecho a exigir que nos amen y a enfadarnos si no lo hacen como queremos. De tanto oír lo del compromiso y la madurez, terminas pensando que es cierto, pero si lo analizas llegas a la conclusión de que el compromiso es en realidad fruto de la desconfianza y del miedo a perder lo que se ama. Hace poco oí no me acuerdo dónde, que el amor es la incertidumbre de la conquista, y sin embargo preferimos la compañía de un amante encadenado, aún a riesgo de perder el amor por las heridas que causan las cadenas, que amar sinceramente y desde la libertad de irse si se acaba el amor, sin reproches, sin deudas Cuando te enamoras lo que asusta no es amar, lo que asusta es tener que olvidar. Y ese terror, nos lleva a cambiar amor por compromiso.
El compromiso es para los que tienen miedo a la soledad, no al amor.

meri

10.8.06

El amor incondicional


El es el amor incondicional.
Me quiere tal como soy y vivimos nuestro amor aprovechando los momentos que estamos juntos, nadie me ha echado nunca tanto de menos como él. Hay veces, cuando duerme, que le miro y me inunda una ternura que quisiera aplastarle de un abrazo.
Es dulce, es bueno, es gracioso, tiene una paciencia salomónica. Sabe cuando puede agobiarme a besos y cuando debe dejarme en paz. Apareció en mi vida por pura casualidad, de esas casualidades que parecen ser más causalidades, que parecen tener un sentido espiritual, y tengo la absoluta certeza de que vamos pasar el resto de nuestras vidas juntos. Le quiero, sin razones de peso, no cambiaria ni una sola de las arruguitas que pueblan su cuerpito peludo canela…es más que un príncipe, es mi Zar.


La dueña de Zar (y eso lo digo yo)

8.8.06

Es una putada intentar hablar en mi idioma con un chino, pero es de idiotas enfadarse porque no te entienda. Ultimamente veo más chinos que en las ferias que frecuento, y no hago más que discutir, o todo el mundo habla en chino o yo no se expresarme. Ultimamente pierdo la paciencia cuando no me entienden y me enfado. Cambia el mundo o estaré cambiando yo. Por qué las cosas no pueden seguir siempre siendo igual, por qué crecer es una constante lucha por mantener creencias que siempre te han servido, pero que se empeñan en cambiar, la amistad, el amor, el sexo, nada es como yo pensaba que era antes. Y ahora no se que pensar, y para qué crear unas nuevas si seguramente con el tiempo no te sirvan.

7.8.06

quien soy yo

QUIÉN SOY YO


Me gusta no darle importancia a las cosas, me encanta reírme de todo y me chifla hacer pasar un buen rato a mis amigos, por eso no me importa que se rían de mí, siempre y cuando sea con gracia.
Desde pequeña se me ha dado bastante bien, lo de la buhonería digo, y con los años he desarrollado incluso un estilo propio de estupidez. Mi abuela y mis amigas incluso dicen que debería ir a la tele, y yo no se cómo tomarme eso…
Ahora hay veces que me bebo el mar si acompaño una gambita con una caña y termino ahogándome en un charquito de ron, y es que cuando falta inspiración el ron acompaña.
Para tener el sentido de humor afinado como una orquesta sin recurrir a la verdadera perla del caribe, es necesario estar de buen humor. Esto que parece tan simple es determinante para lo que para mí verdaderamente importa en la vida, yo y mi relación con los demás. Si yo supiera cuando estoy para los demás y cuando sólo estoy para mi, la estadística de meteduras de pata se reduciría a la mitad, porque cuando no estoy de buen humor convierto el hacer reír en balas de plata capaces de tumbar al hombre más lobo que se me cruce, o en sortilegios poderosos que convierten en rata a la mujer más bruja.
A todos aquellos a los que alguna vez he herido, perdonad y en mi defensa haced memoria y si alguna vez os hice desternillar de risa pensad que las heridas son fallos del sistema.

m.a.a (o eso dicen)