la vida empieza a los treinta

5.11.08

ESE PUNTO



Odio que te vayas tan pronto. Que no permitas que la pasión y la intimidad convivan. Que te asuste tanto la cercanía. Odio que no valores no ser así, que no dejes resquicio a la duda. Ay camandulero, como te sales con la tuya, como consigues que todos te quieran, cómo es posible que la moneda te caiga siempre bien. El caso es que si pienso en la distancia, no envidio tu buena estrella. Si consigo no arrebolarme, en verdad no entiendo que te pierdas esa parte de la vida, la parte mas sabrosa y sentida, la parte en la que siembras para que no crezca el olvido, la parte en la que todos, alguna vez, hemos perdido.