la vida empieza a los treinta

24.1.21

El tren de la Vida


A veces siento la vida. La alegría de vivirla sin más. 

Pongo música, mi cuerpo responde con autoridad. 

Mi mente está despierta. 

Amo sin cesar, amo todo, 

no necesito grandes cosas para amar. 

Y como si de una noria se tratara, 

otras todo es negro, también así sin más. 

No escucho nada, sólo oigo pensamientos negros. 

Pierdo fuerza, pierdo juicio, pierdo alegría 

y gano miedo. 

Y a alguna parte del cuerpo le da por molestar. 

Entonces espero, 

espero y a veces desespero, 

esperando que se gire de nuevo 

la mitad de mi alma, 

la que sólo sabe dar.