COSTA RICA
Conduzco por caminos asfaltados a trozos y a trozos no. Vamos pasando por aldeas y pueblos que huelen a iglesia, trabajo y escuela. Que saben a desayuno fuerte, de esos que se toman al alba, con los pantalones de faena puestos. Pueblos donde la distancia no se mide por kilómetros, sino por tiempo. Y es en el camino y en lo que empleas el tiempo al caminar, donde está el viaje. Y perderse en posibles realidades de uno mismo, en la otra punta del mundo, es fácil por aquí, por su belleza, por su orgullo y por su empeño; y porque yo también atravesaba tres cercas de pequeña para ir a la escuela, ¡que coño!
5 Comments:
PURAVIDA!!!
Besotes.
P.D. La próxima vez me voy de polizón en el avión.
¿Tres? Eso es que atajabas por la campa en vez de entrar por la puerta, malandrina. A menos, claro, que cuentes la cerca del prado de Prados Verdes como tal (no era una cerca, era un montón de piedras).
La cuento, la cuento...y ademas la ultima deberia valer doble, porque el abuelo de Pichi siempre salia con un palo a regañarme...
Hola meripeitx, que te leo a veces, pero nunca te digo ná! Disfrutas de los viajes eh?? Es muy bonito irte muy lejos y encontrarte, sacarle jugo al hecho de ir y no tanto al de llegar. besos mu grandes!
Impresionante pais, increible la gente y lo mejor: bestial la compañia. Gracias chicas por este hermoso viaje
Publicar un comentario
<< Home